Nuevos pasos para impulsar la rehabilitación de edificios en España. Y todo gracias a la aprobación del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia Económica que cuenta con una partida presupuestaria de 72.000 millones de euros (de fondos europeos). Un importante desembolso para financiar cerca de 7 millones de inmuebles de aquí a 2050 y con especial incidencia en la mejora de la eficiencia energética de los inmuebles.
Medidas que inciden especialmente en la reducción del gasto energético y entre las que se encuentra la renovación de las cubiertas. Y es que puede que muchos lo desconozcan, pero por la parte superior de los edificios, sobre todo en el caso del ámbito doméstico y residencial, se pierde el 30% de esa energía. De esta manera lo que se conseguiría es bajar ese consumo al tiempo que no se incrementa la huella ambiental de dicha casa.
Este es el nombre que recibe una reciente campaña puesta en marcha por la sección de tejas de Hispalyt, que agrupa a los principales fabricantes del sector, y donde se ponen las miras en el empleo de la teja cerámica como uno de los materiales más adecuados para este tipo de renovaciones gracias a su capacidad de durabilidad y su valor sostenible. Una solución que, aparte, se instala de manera rápida, segura y de forma más económica.
Entre las principales ventajas de la teja cerámica como parte protagonista de las cubiertas más sostenibles destaca su capacidad para permitir la circulación de aire, con lo que facilita que no haya cambios bruscos de temperatura al tiempo que protege el aislamiento térmico y acústico de esta superficie y evita que la humedad se quede estancada entre las tejas (con la consiguiente aparición de moho).
Además, este material es altamente resistente a todo tipo de golpes o arañazos por lo que garantiza su buen estado durante años, así como una protección óptima de la vivienda durante todo este tiempo. Solo en caso de deterioro del material, las piezas dañadas se pueden sustituir de manera individual por lo que no es necesario actuar en toda la cubierta completa; con lo que se gana en inversión de tiempo y dinero.
Por último, la teja cerámica (que se puede instalar en todo tipo de cubiertas, incluso con inclinaciones inferiores a los 15 grados) ofrece una buena protección frente al ruido, lo que mejorará el confort y la salud del usuario en el interior de la vivienda; no desprende sustancias nocivas y tiene un buen comportamiento ante el fuego, no facilitando su rápida propagación.
Aparte de un valor estético, hay otras muchas ventajas para decantarse por un material cerámico para el tejado. Estas son algunas de ellas:
1.- Sin riesgo de corrosión. Un tejado de tejas resiste perfectamente a las adversidades meteorológicas excepcionales y a aquellas que se producen habitualmente en las zonas climáticas cercanas al mar o con gran humedad. Además resulta ideal si hay fuertes vientos.
2.- Sin ruidos. En el caso de este material no se escuchan los típicos sonidos de la lluvia, sonidos del exterior o de los propios ruidos de contracción y dilatación de los paneles por los cambios de temperatura.
3.- Mayor ahorro. El coste de los materiales que puedan conformar el tejado, incluso teniendo en cuenta la mano de obra de su instalación, suele ser similar y las tejas en este caso son la mejor inversión.
4.- Garantía. En el caso de las tejas, la garantía está entre 30 y 50 años dependiendo del fabricante.
