Con el otoño y la temporada de lluvias, suelen aparecer problemas de goteras en el techo y las paredes de las viviendas, una problemática que va acompañada de importantes molestias y daños que ocasionan en los hogares. En concreto, según los datos de la plataforma digital para la mejora del hogar, habitissimo, hasta el 53,8% de las viviendas en España carecen de un correcto sistema de impermeabilización.
Este es uno de los datos más llamativos que ha dado a conocer habitissimo, con la llegada de los meses más lluviosos del año, con el objetivo de concienciar de la importancia de realizar una buena impermeabilización de las viviendas que acabe con las humedades y goteras. Y es que, más de la mitad de las viviendas de nuestro país fueron construidas antes de 1980, lo que implica que no disponen de un sistema de impermeabilización eficiente. Por este motivo, tal y como explican desde habitissimo, “no es de extrañar que las reparaciones de goteras y otro tipo de humedades sean de las más solicitadas en el último año en nuestro país y que las peticiones para los servicios de impermeabilización hayan aumentado en hasta un 36% en los últimos años”.
Por áreas geográficas, las provincias de Madrid, Barcelona, Valencia y Sevilla son en las que más ha crecido este tipo de solicitudes. En concreto, llama la atención el caso de Madrid, donde las peticiones para impermeabilizar la vivienda han aumentado en un 60,5% y Castellón, donde se han duplicado estas intervenciones.
CUÁNTO CUESTA IMPERMEABILIZAR UNA VIVIENDA
Pensar en llevar a cabo una impermeabilización completa de la vivienda puede generar cierto rechazo si pensamos en el precio, pero lo cierto es que no se trata de una intervención muy costosa y que además se amortiza ya en las primeras lluvias o durante el primer invierno. Así, según los datos de habitissimo, el coste de impermeabilizar una vivienda oscila entre los 600 € y los 2.500 €, dependiendo de las calidades y el tamaño del espacio.
“Una vivienda sin impermeabilizar tiene riesgo de que se produzcan filtraciones de agua durante los días lluviosos. En un principio, estas filtraciones no afectan a la estructura del edificio, pero con el paso del tiempo los resultados de la humedad comenzarán a reflejarse en el techo, las paredes y los suelos, deteriorando la estructura de la vivienda. Por este motivo, realizar una intervención de este tipo resulta fundamental”, subrayan desde habitissimo.
Para saber si necesitamos acometer una intervención de este estilo, es importante observar algunos puntos de la vivienda que nos darán la clave. Así, el olor a humedad o las manchas en las paredes cuando llueve, son las manifestaciones más comunes que nos indican que nuestra casa no está correctamente impermeabilizada y que tenemos que solucionarlo. “Aunque es menos común y quizás menos evidente, las grietas en la cimentación y que se repitan episodios frecuentes de enfermedad, especialmente de tipo respiratorio en los inquilinos; pueden darnos una pista de que necesitamos acometer este tipo de intervención”, indican.
A la hora de llevar a cabo la impermeabilización de la vivienda hay que buscar, en primer lugar, el foco de la humedad, que puede ser estructural, si asciende por los muros desde las aguas del subsuelo, o provenir del interior de la vivienda o el tejado. En este último caso, lo más importante es reparar las goteras del interior para evitar que las posibles filtraciones provoquen problemas futuros más costosos de reparar. Una vez solventada la parte interna, para impermeabilizar el tejado existen sistemas de distinto tipo, que van desde las pinturas acrílicas polimerizadas o los tapagoteras incoloros, hasta las membranas de PVC, sintéticas, asfálticas y poliméricas. “El sistema más eficiente y habitual es la membrana asfáltica impermeabilizante previa imprimación, para asegurar un buen sellado”, apuntan los expertos.
Por otro lado, es importante tener en cuenta el estado de los suelos interiores para atajar cualquier humedad. Para ello, debemos comprobar si el suelo de la vivienda está correctamente nivelado. En este caso, lo adecuado será apostar por un sistema de impermeabilización con poliuretano líquido, autonivelante, que permita arreglar el problema sin añadir espesor al suelo. En el caso contrario, se puede colocar previamente un mortero autonivelante antes de la impermeabilización y aprovechar para arreglar el problema. En cuanto a la impermeabilización de las paredes de la casa, es fundamental verificar la existencia de posibles fisuras o grietas. Así, en el caso de que sean mayores de 1mm, se deben limpiar, imprimir y sellar con una masilla hidráulica.
Por último, los profesionales de habitissimo recuerdan que de nada sirve tener el tejado y las paredes bien impermeabilizadas si no se cuenta con unas buenas ventanas que tengan el grosor correcto, o si tienen algún tipo de filtración, pues pueden ser una vía de escape del calor de la vivienda. “Para evitar filtraciones de temperatura del exterior al interior, el cajón de las ventanas debe estar metido dentro del muro, protegiendo el punto donde se une al marco. Además, tener ventanas con doble cristal y, a ser posible, de PVC, es lo más recomendable para mantener la temperatura”, concluyen los expertos.