La pandemia no sólo ha sido una catástrofe en cuanto a número de víctimas. La Covid, además de vidas, se ha llevado la salud económica de medio mundo. Por este motivo, ahora es el momento de que los países inviertan en sus empresas y pequeños negocios. Es momento de salvar la economía a pequeña escala para poder, al mismo tiempo, minimizar las pérdidas a gran escala. España no será una excepción, así que hoy os traemos algunas de las medidas fiscales que se han puesto en marcha para ayudar a las empresas a salir de este agujero negro.
Lo primero que debemos decir es que a día de hoy estas ayudas siguen pareciendo mínimas. El Gobierno va a tener que intentar arrimar el hombro y sacar nuevos paquetes de ayudas en un futuro próximo, pues entre todas las ayudas no se alcanza ni el 0,9 por ciento del PIB, mientras que en otros países miembros de la Unión Europea, como veremos, han situado estas ayudas alrededor del 10 por ciento del PIB de media.
No obstante, ¿cuáles son estas ayudas? Principalmente aplazamientos de pagos o suspensión de determinados impuestos. Veamos un poco más sobre ellas y quiénes pueden solicitarlas.
El Estado no ha tenido más remedio que invertir más de lo previsto en la economía del país. Para ello, los estímulos fiscales, con diferimientos y suspensión de las cuotas, es de 10,7 mil millones de euros. Se destinarán, a su vez, 3,9 mil millones de euros en aplazamientos de impuestos laborales, contribuciones de la seguridad social y otros gastos de tipo laboral.
Los impuestos empresariales se han tenido que aplazar en muchos casos. Así, el Gobierno de España ha estimado una partida de 1,2 mil millones de euros en estos aplazamientos. Además, se han asignado mil millones de euros para la suspensión total del IVA en suministros médicos que han sido adquiridos por las instituciones públicas, tanto en centros médicos como en instituciones sin ánimo de lucro.
El Ejecutivo también ha destinado 58 millones de euros en aplazamientos o flexibilización de los gastos de servicios públicos para empresas y trabajadores autónomos.
Ante todas las ayudas y el dinero invertido sólo hay una lectura clara para muchos: insuficiente. Es cierto que la salud económica del país no era de las mejores antes de la pandemia, pero también es cierto que en lugares como Italia, el paquete de ayudas alcanza el 43% de su PIB. En Alemania, por ejemplo, sería de un 34,5% de su PIB. En realidad, sólo Grecia y Hungría quedaron por detrás de España si se suman los estímulos fiscales y avales crediticios.
¿Un buen comienzo? Sí, lo es. No obstante, todo parece indicar que el Gobierno de España tendrá que intentar aumentar las ayudas para que la economía española no termine desmoronándose y pasándonos factura a todos.